Te invitamos hacer esta oración al Padre, arrodíllate y rézale para que nos glorifique de riquezas, que pueda fortalecernos con su poder a través de su espíritu en nuestro ser interior. Toma un minuto para hacer esta oración.
Dios, Tú eres quien todo lo puede, Tú eres nuestro protector y nuestro Padre, nosotros sabemos que nuestros corazones pertenecen a Ti.
Hoy venimos ante Ti, para que nos glorifique de riqueza, nos des prosperidad y abundancia de bendiciones.
Padre, te pido que seamos fieles a la vocación que nos has dado, que seamos fieles a Tu palabra, que hagamos cada acción según tu voluntad.
Que todas nuestras experiencia trabajen en nosotros para siempre y así ser glorificado por la riqueza que tienes para nosotros tanto Espiritual como económicamente.
Bríndanos la certeza gozosa de que nos gobiernas con tu Espíritu, que Tú amor abunda sobre todo nosotros y que haces que cada vez más personas te conozcan y tengan la sensibilidad a lo que es bueno, correcto y perfecto.
Fortalece todo lo bueno que tenemos, todo lo que proviene de Ti y es eterno, todo lo que es correcto y justo.
Padre, que tú nos permitas llevar el pan de cada día a nuestros hogares, que desaparezca todo espíritu de escasez, que seas Tú llevando el control de mis manos, para que no haya fuga de dinero.
Quédate con cada uno de nosotros, para que todo nuestro trabajo y actividad sea supervisado por Ti y que podamos ser consciente de que tu espíritu guía está trabajando en cada uno de nuestros corazones.
Todos nuestros bienes materiales, lo ponemos en tus manos Padre amado, que seas Tú llevando el control de nuestros gastos, que seas tú duplicando nuestra inversión. Te pedimos que aleje todo pensamiento negativo y carencia o falta de dinero que haya en nosotros.
Hoy nos inclinamos ante ti en adoración, porque eres nuestro Dios y eres quien tiene poder sobre nosotros, sabes quienes somos y quiénes seremos.
Padre, me siento seguro porque sé que estoy bajo tu cuidado. Bendíceme y cúbreme con tus brazos. En el nombre de Jesús. Amén.
Hacer esta oración con fe y esperanza. Inclinémonos en adoración, arrodillémonos ante el Señor nuestro hacedor; Él es nuestro Dios y nosotros somos la gente de su pasto. Oremos desde nuestro corazón para que Dios cumpla cada una de nuestras peticiones. Orar, es la mejor manera de acercarse a Dios.
Deja un comentario