En este día empieza poniendo tu vida en las manos de Dios, deja que Él entre a tu hogar y la llene de bendición. Haz esta poderosa oración que te guiará a que hagas tus peticiones:
Padre Celestial, Te abro las puertas de mi hogar, para que esparza en cada rincón de mi casa Tu bendición, pongo en tus manos todos mis sueños, Tú mi Dios eres mi roca y mi fortaleza, y aunque lleguen días oscuro, mantendré mi fe en alto, porque sé que llegarán días de triunfo y de bendición.
Gracias Padre Celestial porque cuando proclamo Tu Nombre “Jehová” mi alma y mi cuerpo se llenan de fortaleza y soy capaz de enfrentar cualquier problema, soy capaz de conquistar terreno de soledad y transfórmalo en un lugar hermoso donde reine Tu paz.
En esta mañana invoco la protección de Tu Espíritu Santo, para que el espíritu de la desesperación no me envuelva en los momentos turbios de mi vida. Te abro las puertas de mi corazón y mi hogar para recibir todas las bendiciones que quieras darme.
Amado Señor, vengo ante Ti con un corazón agradecido y lleno de alegría, para darte las gracias por todas las cosas maravillosas que me has regalado, por permitirme tener un techo en donde puedo descansar y compartir con mi familia. Quiero darte las gracias por cada uno de los planes que has destinado para mi, toma el control de cada uno de mis pasos, alinia mis propósitos con los tuyos, para caminar conforme a tus deseos.
Te ruego Señor, que entres en nuestro hogar y que Tu luz alumbre cada una de nuestras vidas y llene nuestra alma de júbilo. Mira nuestros anhelos y necesidades y que Tu ejército defiendan nuestro hogar de todo fuerza del mal. Amén.
Cuando haces esta oración con Fe, puedes tener la certeza que Dios te escucha y que siempre está a tu lado. Deposita todos los planes que tienes en sus manos y sigue adelante con gozo y entusiasmo, pues Dios ha destinado grandes cosas para bendecir tu vida.
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