Mi nieto es el pedacito de cielo que Dios me ha regalado

Mi nieto es el pedacito de cielo que Dios me regaló. Dios me ha dado la dicha de vivir una vida llena de amor, sin preocupaciones adicionales y rodeada de personas que me aman y cuidan de mí. Y a pesar de todas esas bendiciones Dios me sigue sorprendiendo dándome la oportunidad de volver hacer madre, de volver a tener la oportunidad de hacer las cosas bien, para seguir construyendo el futuro de ese nieto que ha venido a iluminar mi vida.

Ese niño, fruto del amor de aquel pequeño ser que vi nacer, hoy se ha convertido en mi todo y en un motivo más para seguir luchando. A pesar de mi edad esto me da fuerza para seguir viviendo, porque tengo la esperanza de verlo crecer y verlo convertido en una persona de bien.

Mi nieto es la luz que ha venido a encender mis ganas de vivir. Verlo jugar y permanecer a su lado me rejuvenece y me hace sentir muy especial. El sé ha convertido en mi pequeño universo y mundo hoy gira en torno a él. Sus travesuras y su forma de expresarme cuanto me quiere llena de color mi vida y colma mi hogar de felicidad.

Mi nieto, es el mejor obsequió que Dios me dio

Le agradezco tanto a Dios por este hermoso regalo, pues el amor que siento por el único. Mi nieto representa que todo el esfuerzo que realice en mi juventud valió la pena, porque al ver el brillo de sus ojos y su contagiosa sonrisa sé que forme una familia llena de amor.

Ese niño a pesar de su corta edad, pudo revivir mis ganas de soñar y de volver a sentirme útil. Pues el me ha permitido ser participe de sis sueños y yo soy su ejemplo a seguir. YO AMO A MI NIETO Y TU AMAS EL TUYO “si es así escribe el nombre de tu nieto los comentarios y vamos a orar el”

Oración por mi nieto

Bendito Dios, te pido que bendiga a mis nietos. Cúbrelo con Tu preciosa sangre y que nada malo le pueda pasar. Cuídalos para que nunca sepan lo que es tener hambre, y para que te den gracias por las bendiciones del amor que tú le das.

Padre celestial, coloco el bienestar de mis nietos en tus manos. Tú sabes cuanto yo los amo y que deseo lo mejor para ellos; por eso quiero que Tu presencia habite en ellos para que nadie ni nada lo pueda lastimar.

Bendice y guarda a mis nietos. Míralos con agrado, y ten misericordia de ellos. Muéstrales tu favor, y que tu paz repose en sus vidas.

Dios, ayuda a que mis nietos sean personas compasivas, que puedan alcanzar sus metas sin atropellar a nadie, que sean personas humildes y sencillas ante toda Tu creación, que sean personas respetuosas y fieles a tus palabras, que sepan extender sus manos ante lo más necesitados y sobre todo que sean personas respetuosas ante sus padres. Amén.

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